(Madrid, 1964)
No pronostico y, sin
embargo, sé que seré fugitiva. Nací huyendo. Inventé
significados para sostener caracolas en los árboles y me emborroné
de versos. Y, aún sin pronosticar, observo nítidamente cómo
abandono mis últimos vestigios.
No pronostico. Sigo avanzando de
boca en boca. De río en río. Y me desuno, y me regreso, y me contagio
para oírme brotar. Escribo.
Ha publicado Hazversidades
poéticas en Cuadernos del Laberinto.
CUANDO
ABRAS, SI ES QUE ABRES después de los acentos alguien te nombrará
los mares extendidos, alguien te mirará sin desquite y besará
tus ganas con el beso que besa las razones, después de los acentos (si
tú quieres), inventaremos pájaros y como en una película
de cine mudo pintaremos la pena con su fusil de estatua y su tenaz mirada de
trampa hereditaria, después de los acentos seremos a pesar de las
palabras, y con ellas aspiraré la acústica de tu último
silencio con trapos de colores, si tú quieres, en la hora de todo
lo inconcluso cuando abras si es que abres tus excusas y tu
cárcel. |